El bebé en la undécima semana de embarazo
Aunque el corazón del feto lleve semanas latiendo, es ahora cuando lo hace con fuerza suficiente para que el médico o la comadrona puedan oírlo con un aparato especial (Doppler). También usted podrá escucharlo por primera vez, viendo que late el doble de rápido que el suyo (unas 120-140 pulsaciones por minuto). Aunque si la comadrona no lo puede captar aun no se preocupe, ya que puede estar en una posición que amortigüe el sonido.
Durante este mes pasado, además de perfeccionar el ritmo cardíaco, el corazón ha desarrollado sus cuatro cavidades, aunque algunos de los tabiques no se terminarán hasta después del parto.
Otra cosa que se ha ido formando durante las últimas semanas ha sido una fina capa de piel sobre el cuerpo del feto. Ahora se desarrollará una capa especial que se convertirá en las uñas de los dedos de las manos y de los pies.
Aunque parecía que durante las últimas semanas el feto no crecía mucho, durante esta semana ha alcanzado un poco más de 5 centímetros, de los cuales, la mitad corresponden a la cabeza del feto, lo que demuestra el rápido crecimiento del cerebro.
La mujer en la undécima semana de embarazo
Nadie sabe con exactitud porque aparecen los antojos, pero si es verdad, que en algunos momentos, casi todas las mujeres embarazadas les apetecen determinados alimentos. Algunos expertos piensan que es la manera que tiene el cuerpo de manifestar lo que necesita. Otros se muestran en desacuerdo. No hay porque comer desesperadamente todo lo que “exija” su cuerpo, pero tampoco pasarlo por alto, sobre todo si le apetece algo sano.
La vitamina C es muy importante porque ayuda al feto a crear nuevas células y desarrollar huesos y dientes más sanos. Por ello es necesario consumir de 80 a 100 miligramos de vitamina C al día mientras se está gestando al bebe. ¿Dónde encontrarla de manera natural? Las naranjas y otros cítricos (mandarinas, limón, pomelos…) la contienes, así como las fresas y el brécol.
Si bueno saber que existe al menos un estudio que demuestra que la exposición prolongada a los rayos UVA durante el embarazo puede causar una deficiencia de ácido fólico en la madre, el cual es un nutriente esencial para prevenir los defectos de la médula espinal en el feto. Si además en vez de ser bronceado natural, es artificial debe puede tener otros efectos perjudiciales, ya que durante el embarazo la piel es mas sensible a los rayos ultravioleta, lo que puede producir con facilidad zonas de hiperpigmentación o manchas en la piel( cloasma ) muy difíciles de eliminar después del parto.